Al hablar de recubrimientos metálicos en Toledo, es importante conocer los diferentes procesos por los que puede pasar una pieza. Uno de ellos es el famoso galvanizado, una solución perfecta para otorgar dureza y evitar la corrosión.
En este artículo sobre recubrimientos metálicos en Toledo queremos hablar del galvanizado y la importancia que tiene para la resistencia de las piezas metálicas. Acompáñanos y entérate de más.
El galvanizado es un procedimiento que se usa para la protección del acero frente a la corrosión, la cual es causada por la humedad y el aire mediante una reacción química. Se realiza, de hecho, desde hace más de dos siglos con resultados exitosos.
Para lograr un galvanizado óptimo, las piezas son sumergidas en zinc fundido. El resultado son piezas resistentes, durables y muy fuertes frente a la abrasión, la corrosión y los golpes.
Este procedimiento puede parecer, a simple vista, similar al zincado, pero son diferentes. Por un lado, el galvanizado es caliente mediante fuego o inmersión. La temperatura en la que se introducen las piezas en zinc lleca casi a 500 grados centígrados. La capa resultante es muy adherente y dura.
Por el contrario, el zincado es similar al proceso del cobreado o cromado. Es un proceso de electrodeposición y se obtiene una pieza con una capa fina. Las piezas resultantes tienen más valor estético, son uniformes y suaves.
Las piezas galvanizadas son más protectoras que las zincadas, aunque si estas últimas pasan también por otro proceso, por uno de pasivado, podría lograrse un nivel muy alto, similar al primero.
En Recubrimientos CG esperamos que te hayan quedado claros estos procedimientos para realizar recubrimientos de piezas diversas. Contáctanos, consulta con nuestro equipo de expertos y permite que te guiemos para que obtengas y resuelvas tus necesidades. En la empresa estamos para servirte y ayudarte.